jueves, 1 de diciembre de 2011

EJERCICIO PARA SENTIR SU ENERGIA PSICOTRONICA


Para verla: Encuentre un fondo negro. Tóquese las yemas de los dedos de la mano izquierda con las yemas de los dedos de la mano derecha. Inspire profundamente; lentamente, vaya separando los dedos. Verá unas líneas blancas transparentes que los conectan aún.

Para sentirla: Mantenga la palma de la mano izquierda verticalmente, frente a la derecha. Extienda los dedos de la mano derecha apuntando hacia la palma izquierda. Mantenga los dedos al menos a quince centímetros de la palma para no sentir el calor. Ahora vaya moviendo lentamente los dedos de la mano derecha de arriba abajo como si estuviese disparando balas a la mano izquierda. Al hacerlo, sentirá como un hormigueo u otra sensación que recorre su palma izquierda de arriba abajo. Eso que siente es la energía psicotrónica. ..

Para utilizarla: Mantenga un dibujo en su mente de lo que quiere que ocurra, de una forma especial que le enseñaré. Luego extienda los dedos hacia la persona o cosa en cuestión —o hacia un retrato o esquema de la persona o cosa—, y lo que quiere usted que ocurra quedará activado.

Ejercicio: Pruebe este juego con sus amigos: haga pasar una bolsa de papel. Pídales que echen dentro una sortija, un reloj, un peine o cualquier pertenencia que nadie pueda ver. Vuelva después a pasar la bolsa. Haga que cada uno saque un objeto que no sea el suyo. En cuanto lo tengan en la mano, y sin que puedan examinarlo en busca de pistas, pídales que describan a la persona a quien pertenece describiendo sus sentimientos al tener entre las manos ese objeto.

Los resultados suelen ser sorprendentes. Las manos son sensores radiónicos del cuerpo y pueden obtener información. Esta información suele desdeñarse porque se piensa que no es de fiar, eso en el caso de que tengamos conciencia de ella.

VISUALIZACION


VISUALIZACION
El primer paso consiste en crear un elemento para la visua­lización,   una   pantalla  mental. Debe ser como una pantalla de cine de gran tamaño, pero no es conveniente que llene por completo su campo de visión mental. No la imagine detrás de sus párpados, sino frente a usted, a un distancia aproximada de dos metros. Sobre esta pantalla proyectará cualquier cosa en la cual decida concentrarse. Más tarde habrá otros usos para ella.

Una vez que haya construido esta pantalla en su mente, proyecte en ella algo familiar y sencillo, como una naranja o una manzana. Cada vez que entre a nivel, sostenga tan solo a una imagen; la puede cambiar en la siguiente ocasión. Concéntrese en hacerla cada vez más real, en tres dimensiones, a todo color, con todos sus detalles. No piense en nada más.

Me­diante el uso de su mente, entrene a su cerebro para entrar tranquilamente a nivel Alfa y para concentrarse exclusivamen­te en una imagen sencilla en forma cada vez más vívida En un principio, (cuando interfieran otros pensamientos, mués­trese indulgente pero lentamente, haga que se aparten en for­ma paulatina y regrese al centro al único objeto que le debe interesar. El irritarse o ponerse tenso lo sacará del nivel Alfa.